domingo, 14 de marzo de 2010

A un paso de Madrid: la desconocida Guadalajara rural.

La ruta del románico rural de Guadalajara recorre la comarca de la Serranía, al norte de la provincia.  Nos adentraremos en pequeños pueblos que, poco a poco han ido quedándose vacíos, pero que todavía guardan un legado arquitectónico de gran valor.
Se trata de obras de arte sencillas, sin destalles ostentosos, de un encanto caracterizado por su pequeño tamaño, con la única excepción de Sigüenza y Atienza, que cuentan con grandes monumentos entre sus calles.

Nuestro punto de partida será Campisábalos. Son visitas indispensables la iglesia de San Bartolomé (s. XII) , de la que destaca su galería porticada pero, sin duda, el detalle más llamativo del románico de esta localidad lo encontramos en la pequeña capilla de San Galindo (s.SV), que nos muestra, a lo largo del muro exterior, un friso que representa los meses del año según las faenas agrícolas.
                                                                 Iglesia de San Bartolomé

Ha de saber el viajero, que todo tesoro tiene un guardián, por lo que será imprescindible preguntar por Severino Simeone, que es quien nos abrirá las puertas de los monumentos para poder visitar su interior.


Continuamos por la carretera CM-110 hasta Albendiego. Allí nos encontraremos la iglesia de Santa Coloma, construida a finales del siglo XII en arenisca bermeja. De gran belleza son sus vanos, rellenos con celosías y abrazados por tres arquivoltas.

                                                           Detalle de los vanos de la iglesia de Santa Coloma
Atienza, a 18 km. de Albendiego, es otra parada obligatoria. Se trata de una villa monumental, en la que aún perduran cinco templos románicos: San Gil, San Bartolomé, Santísima Trinidad, Santa María del Rey y Santa María del Val. Otra de las joyas arquitectónicas de la población es el castillo, desde donde se puede observar una bonita panorámica de la serranía guadalajareña.

                                                      Iglesia de San Bartolomé

Hay quien afirma que la iglesia de Santa María del Rey fue construida sobre una antigua mezquita tras la reconquista de la población, así, en uno de los arcos puede leerse la siguiente inscripción: "Alá es grande". Otra muestra de la influencia árabe en el arte de Atienza son las figuras que sujetan las arquivoltas de la ermita de Santa María del Val, que han sido identificadas como musulmanes.

La iglesia de San Gil conserva del arte románico la cabecera, pues fue reconstruída en el siglo XVI, caso muy similar es el de la Santísima Trinidad.
Pinche aquí para saber cómo llegar desde Albendiego hasta Atienza.

Antes de acercarnos a otra de las localidades monumentales de Guadalajara, sería muy recomendable realizar una parada en la villas de Carabias y Palazuelos.

La iglesia de San Salvador, en Carabias, fue construida en el siglo XIII. Si bien a primera vista parece tratarse de una iglesia románica con el clásico pórtico de arcos de medio punto, al observar más detenidamente, podemos sorprendernos con los capiteles de las columnas laterales, que recogen las figuras de una sirena de doble cola  y una cabeza humana.

No menos sorprendente es la muralla fortificada de Palazuelos, que llama la atención por el buen estado en el que se encuentra. Los muros abrazan a toda la localidad, a la que sólo se puede acceder por dos de sus portones.

                                                              Muralla de Palazuelos

Pinche aquí para llegar de Atienza a Carabias.

Por último, nos detendremos en Sigüenza. La catedral de Santa María reclamará nuestra atención según vayamos aproximándonos y, una vez en la villa, resultará difícil escapar a su encanto. Dentro de ella, merece la pena visitar el sepulcro del Doncel, todo un símbolo para los seguntinos, que honra a un caballero de la orden de Santiago:  Martín Vázquez de Arce.

                                                                    El Doncel 

Varios estilos artísticos confluyen en la catedral, pero quizá el detalle más propio del románico lo encontramos en la portada principal, donde el rosetón de doce radios preside de forma majestuosa la entrada.

Otro monumento románico destacable es la iglesia de San Vicente, construida en el siglo XII en honor al patrón de la localidad, que, a pesar de poseer una única nave, muestra una portada con arquivoltas muy rica por su decoración. Similar es el caso de la iglesia de Santiago, cuya decoración es aún más elaborada pues las hojas de acanto talladas en sus capiteles están perfectamente definidas.

Pinche aquí para llegar desde Palazuelos a Sigüenza.

Hemos de decir que los monumentos de los que hablamos en esta entrada son tan solo una muestra de los tesoros arquitectónicos de la provincia de Guadalajara, no obstante, podrían incluirse algunas otras localidades como Villacadima, Cantalojas o Galve de Sorbe, que compiten en belleza y singularidad con las aquí citadas.















1 comentario:

  1. ¡¡Una ruta estupenda!! A ver si llega el buen tiempo para poderle dedicar un fin de semana. Por cierto, que la Sierra de Guadarrama tiene decenas de lugares preciosos, tanto en invierno como en verano. Asique ánimo a todos los lectores de 'Arteactualidad'. ¡Qué no todo se quede en los centros comerciales!

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